Cuando pensamos en el bienestar de nuestro maestro de vida, usualmente nos enfocamos en su vitalidad, su energía o el brillo de su pelaje. Sin embargo, existe un órgano silencioso pero crucial para su salud integral: el intestino. Mucho más que un simple tubo digestivo, el intestino de los perros es una central de comunicación que impacta directamente en su mente y emociones.
Acompáñanos a descubrir por qué la conexión intestino-cerebro en tu perro es la clave para una vida en armonía con tu perro y cómo una alimentación consciente y funcional puede fortalecer este conexión.
¿Por qué el intestino es el segundo cerebro de tu perro?
El término "segundo cerebro" se refiere al complejo sistema nervioso entérico (SNE), una red de neuronas que recubre el tracto gastrointestinal de tu perro. Este sistema funciona de manera casi autónoma, gestionando la digestión y el movimiento intestinal. La conexión intestino-cerebro en perros es una vía de doble sentido, donde las señales nerviosas, químicas y hormonales fluyen constantemente. Comprender esta relación es el primer paso para ofrecerle a tu maestro de vida una experiencia de vita plena.
La microbiota: el puente entre el intestino y el cerebro
El protagonista de esta historia es la microbiota intestinal en perros. Se trata de billones de bacterias y microorganismos que viven en el intestino y desempeñan roles vitales, desde sintetizar vitaminas hasta proteger contra patógenos. Estas bacterias se comunican con el cerebro a través del nervio vago y la producción de neurotransmisores, influyendo directamente en el estado de ánimo, el comportamiento y la respuesta al estrés de tu perro.
Bienestar canino: ¿cómo se relaciona la salud digestiva con las emociones?
La relación igualitaria entre perro y humano se basa en la comprensión. Y en este sentido, la relación entre el intestino y el cerebro de tu perro es crucial para su equilibrio emocional.
Un intestino sano, con una microbiota equilibrada, promueve la producción de serotonina, conocida como la "hormona de la felicidad", lo que ayuda a tu perro a vivir en bienestar. Por el contrario, un desequilibrio puede manifestarse no solo con problemas digestivos, sino también con ansiedad, estrés o cambios de humor. Cuidar su salud digestiva es, por tanto, nutrir su cuerpo y su alma.
Nutrición funcional: el camino hacia el equilibrio
La prevención es la mejor herramienta para mantener este balance de la vita. Una alimentación consciente y funcional es fundamental para nutrir su cuerpo y alma. En Vivance, nuestro alimento Vitality está diseñado con probióticos, Manano-oligosacáridos (MOS), Fructo-oligosacáridos (FOS) y betaglucanos, que favorecen una flora intestinal equilibrada y una digestión óptima, fortaleciendo el sistema inmune y contribuyendo a su vitalidad y fuerza.
Recomendaciones para el bienestar de tu perro
- Dieta equilibrada: Asegúrate de que su comida contenga probióticos, prebióticos y fibras que promuevan una microbiota saludable. Una dieta libre de granos y gluten también puede prevenir sensibilidades que afecten su salud digestiva.
- Actividad física: El ejercicio regular no solo ayuda al control de peso, sino que también estimula el movimiento intestinal y reduce el estrés, fortaleciendo la conexión con tu perro.
- Consulta profesional: Ante cualquier síntoma persistente o preocupación (cambios en las heces, vómitos, irritabilidad), la mejor decisión es buscar el diagnóstico y tratamiento de un veterinario.
Nutre su cuerpo y alma con Vivance
En Vivance, creemos que cada momento compartido con tu perro merece ser por años mejor vividos. Nuestro compromiso es aportar a su balance y equilibrio desde la nutrición, con fórmulas que cuidan su cuerpo y alma. Nuestros alimentos, con ingredientes naturales y funcionales, están diseñados para fortalecer su salud digestiva y, por ende, su bienestar de tu perro.